viernes, 29 de octubre de 2010

Escuadrones holandeses a la caza de explosivos de la Segunda Guerra Mundial

"Todos los días, al compás de las manecillas del reloj, el servicio encargado del manejo de explosivos siempre tiene dos o tres unidades trabajando en la identificación y el desmantelamiento de explosivos convencionales e improvisados", dijo a BBC Mundo Vanessa Vroomans, del Ministerio holandés de Defensa.

Si bien en todo el territorio suelen encontrarse explosivos no identificados, la mayoría suelen aparecer en lo que fue la primera línea de fuego durante la Segunda Guerra Mundial, en la costa del Mar del Norte.

"En total, nuestro servicio encargado del manejo de explosivos recibe unas 2,000 solicitudes de intervención al año. Algunas pueden resultar en el descubrimiento de varios explosivos, otras en nada".

Las unidades están formadas por grupos de dos o tres expertos especializados en detonadores, cuentan con unidades blindadas, radares para la identificación de artefactos bajo tierra y robots operados a control remoto.

Por lo regular, el Ministerio de Defensa se entera de la existencia de explosivos cuando se inician los trabajos para transformar un predio rural en un complejo residencial, cuando los tractores preparan la tierra para el próximo cultivo o cuando las redes de un pesquero atrapan una mina naval.
Balneario explosivo

Algunos materiales fueron abandonados por las tropas invasoras alemanas durante su retirada, otros son misiles lanzados por los bombarderos canadienses, británicos o estadounidenses que nunca detonaron.

Tal y como lo ilustra el más reciente caso registrado en Cadzand, un balneario veraniego localizado al sur de Holanda regularmente concurrido por turistas alemanes y nacionales, y donde se pretende construir un lujoso complejo residencial y un parque de recreo.

"Sabíamos que en la zona donde se va a desarrollar el proyecto urbano íbamos a encontrar material bélico, pero nunca pensamos que sería en esa cantidad", explica en entrevista el historiador Arco Willeboordse.

El experto en arqueología militar afirma que hasta el momento se han descubierto en el predio en cuestión, 1.100 minas personales abandonadas por las tropas alemanas y 6 misiles de 500 libras que fueron, aparentemente, lanzados por aeronaves británicas.

"En aquel entonces, los campos eran pantanosos, llenos de barro y lodo, suponemos que los misiles cayeron de tal forma que se enterraron sin llegar a explotar", asegura a BBC Mundo, Humphrey Saffrie, responsable del departamento de seguridad del Municipio de Sluis.

"Estamos hablando de una bomba activa y que es capaz de destrozar todo lo que se encuentre a un radio de 150 metros cuadrados de no ser manejada por personal especializado".
Prohibido usar detectores

En algunas zonas del país donde se sabe que hubo intensa actividad militar durante la guerra, están estrictamente prohibidos los detectores de metales.

"No podemos permitir que un curioso se ponga a excavar clandestinamente y en lugar de encontrar algún tesoro se encuentre con una bomba", sostiene el experto en explosivos Saffrie.

Las autoridades holandesas desconocen la cantidad de torpedos, minas y granadas que aún se encuentra bajo tierra, aunque de acuerdo con datos de la Marina habría entre 10,000 y 30,000 toneladas de explosivos en la profundidad de sus mares.

Por su parte, las autoridades locales de la Organización Internacional del Medio Ambiente, un organismo compuesto por las municipalidades que tienen salida al Mar del Norte, considera que desde Francia hasta el Báltico hay 300 mil toneladas de explosivos y armas químicas debajo del mar.

«Yo sobreviví a Mauthausen»

A sus 89 años, José Marfil Peralta tiene un objetivo marcado en la vida. «Mi misión es que se conozca mi testimonio, para que la juventud defienda su libertad y lleve una vida tranquila y en armonía. Lo que me queda es poco, pero lo consagro a esta memoria». Marfil es el reflejo de lo que fue la barbarie nazi en la Segunda Guerra Mundial, siendo uno de los supervivientes del campo de concentración más sanguinario que se conoció en la Historia: el de Mauthausen.
Durante cerca de cinco años, desde las navidades de 1941 hasta 1946, Marfil consiguió mantenerse vivo durante uno de las etapas más terroríficas que recuerda en su vida. Para él, «fue la suerte» el hecho de que pueda contar hoy su relato. Sin embargo, su habilidad como carpintero, trabajo que aprendió desde muy joven, fue su salvavidas para evitar ser exterminado. «Hacía muebles, y eso me ayudó a sobrevivir allí».

El periplo hasta llegar a la localidad austríaca fue largo. En 1921 nació en Rincón de la Victoria y a los tres años tuvo que dejar su tierra natal debido a los traslados profesionales de su padre, inspector de aduanas, llegando hasta Barcelona. Tras declararse la Guerra Civil, el padre combate fiel a la República, y cuando cumple 18 años, tienen que exiliarse a Francia.

«Ingresé en el ejercito francés, dispuesto a vencer al fascismo. Queríamos luchar por la paz y entonces fui una víctima más de la historia». Fue hecho preso, junto con su padre, por los nazis y llevados a los stalags (campos para prisioneros de guerra). Posteriormente, fueron declarados apátridas y llevados al campo de Mauthausen, el primero de categoría III: equivalente a exterminio. Su padre fue el primer español deportado en morir allí, al igual que miles y miles de personas.

Muchos recuerdos se vuelven a la mente de Marfil, como caminar por el lugar «y ver a cada lado, cadáveres que se acumulaban», señala. «El hombre era un palo que había que quemar, y necesitaban únicamente a gente para trabajar. Era un campo para exterminar, algo único en el mundo y no visto en otras guerras», asegura.

Fue con la llegada del ejército americano a Mauthausen cuando acababa la pesadilla. «Para mí, fue como nacer por segunda vez», apunta con voz tranquila. En otras ocasiones y con motivo de homenajes a las víctimas del nazismo, ha visitado el campo de concentración austríaco. Solo 2.000 de los 20.000 españoles apresados saldrían de allí con vida.

No volvió a España, y fue en Perpiñán (Francia) donde fijó su residencia. Esta semana, y tras más de ochenta años, se ha empeñado en conducir su propio coche desde Perpiñán hasta Rincón de la Victoria para poner los pies en su tierra natal: «Aquí me voy quedar una semana».

Su testimonio se enmarca en las II Jornadas de Recuperación de la Memoria Histórica, que se desarrollarán en el Ayuntamiento de Rincón de la Victoria. La ponencia de hoy será La historia oculta de las fosas con responsables de exhumaciones en Málaga, como las llevada a cabo en Alfarnatejo.

Mañana, continuarán las jornadas con Los niños de la Guerra y por la tarde con Un malagueño en Mauthausen, con el testimonio vivo de José Marfil. Su historia también la ha llevado a un libro, que ha sido editado en Francia bajo el título: He sobrevivido al infierno nazi.

Los aliados temieron que Hitler resistiera en los Alpes austríacos, según documentos del Archivo Nacional británico

Las fuerzas aliadas temieron que Adolf Hitler resistiera al final de la II Guerra Mundial en un gran refugio secreto construido en los Alpes austríacos, según documentos del Archivo Nacional británico desclasificados hoy.

La información recopilada por los servicios de inteligencia decía que el fuhrer planeaba hacer "un último esfuerzo desesperado" para no rendirse a los aliados desde lo que se denomina un "Reducto Nacional Nazi", que podía albergar suficiente comida y armas destinadas a 60.000 hombres durante un periodo de hasta dos años.

Los datos fueron recopilados de fuentes de los servicios de inteligencia de la resistencia francesa, del espionaje suizo y de prisioneros de guerra, que aseguraban que se estaba preparando un refugio para "criminales de guerra", "nazis fanáticos" y otro tipo de personas próximas al III Reich "que no tenían nada que perder".

Los estadounidenses, incluso, llegaron a creer que los alemanes se estaban preparando para librar una guerra de guerrillas desde la montaña donde se iba a construir el refugio, con el objetivo de "llevar a cabo una lucha terrorista sin piedad".

Las 150 páginas publicadas por el Archivo Nacional, 65 años después del final de la contienda mundial, incluyen también testimonios que apuntan a la construcción, entrenamiento y movimiento de tropas, armas, comida y combustible en la zona.

Uno de los informes semanales que enviaban los servicios de inteligencia a la Fuerza Expedicionaria del Cuartel Central de los Aliados, con fecha del 20 de febrero de 1945, apuntaba al "establecimiento de un último bastión de resistencia nazi en una zona alpina del oeste de Austria y de la Alta Baviera".

El reducto es descrito como un lugar "en el que la elite de la Alemania Nacional realizará una última resistencia desesperada".

Otro informe, de una fuente francesa y remitido a la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS, la antecesora de la actual CIA estadounidense), asegura que "la comida y las municiones del reducto parecen ser suficiente para dos años".

"La munición está destinada para 16 divisiones y la comida para 60.000 hombres", se afirmaba en el informe fechado el 7 de abril de 1945, en el que se añadía que los nazis planeaban llevarse consigo entre 300.000 y 400.000 prisioneros de guerra como escudos humanos, para evitar que los aliados los gasearan.

Las fuentes suizas indicaron, por su parte, que "la importancia capital del reducto es que será utilizado como el centro desde el que se dirigirán las actividades de los elementos pro nazis y fascistas en todos los países europeos y particularmente en Alemania".

"Estas actividades serán principalmente: propaganda, sabotaje, atentados y sobornos. Se coordinarán desde la radio, habrá correos uniendo a los grupos de resistencia y se realizará un esfuerzo para convertirlo en algo mundial", se añadió.

Este documento incluye los detalles facilitados por un "testigo fiable", que ofrece las supuestas pruebas de que se estaba construyendo una fortaleza en el interior de una montaña, rodeada de enormes fortificaciones, al suroeste de la ciudad de Salzburgo.

Según los documentos conocidos hoy, "el alma de este movimiento" era el máximo responsable de las SS, Heinrich Himmler, partidario de "una guerra abierta" final con el refugio como base central.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Ecuador: pescadores hallan bombas de la II Guerra Mundial en islas Galápagos

Un grupo de pescadores encontró unas doce bombas presuntamente de la Segunda Guerra Mundial mientras realizaba tareas de limpieza submarina en la costa de las islas Galápagos, según informaron las autoridades de Ecuador.

Según una autoridad portuaria, las bombas permanecieron en el mar por más de 60 años, tiempo en el cual el óxido y la salinidad afectaron la parte externa de la estructura, pero la pólvora que está en el interior de la misma se mantiene intacta.

El país andino autorizó a Estados Unidos la instalación de una base militar en la isla Baltra durante la Segunda Guerra Mundial por la estratégica ubicación del lugar, que permitía mantener vigilancia sobre el canal de Panamá.

Las autoridades de las islas, destino turístico de interés por la diversidad de su flora y fauna, analizan la posibilidad de realizar un barrido submarino en toda la zona ante el temor de que se encuentren más bombas.

La Alemania nazi centra el XIII ciclo de 'La historia a través del cine'

Los apasionados del séptimo arte tienen una cita en la casa de cultura Ignacio Aldecoa. El número 9 del Paseo de la Florida es el escenario elegido para acoger el XIII ciclo 'La historia a través del cine', organizado por el Instituto de Historia Valentín de Foronda, que versará sobre la Alemania nazi.

El programa, que se nutre de tres largometrajes, se abre hoy con 'Olympia', la primera parte del mega documental 'El festival de las naciones', donde Leni Riefenstahl filma los juegos olímpicos celebrados en Berlín en 1936. Mañana, se podrá visionar 'El barón de Münchhausen', de Josef von áky, y el jueves será el turno de 'Europ'a, de Agnieszka Holland. Los filmes se proyectarán a las 19.15, la entrada será libre y gratuita. Además, las películas serán comentadas por la lectora de alemán de la UPV Julia Brade, el profesor de la Universidad de Barcelona Rafael de España y el profesor de la Universidad Pompeu Fabra Marició Janué i Miret.

lunes, 25 de octubre de 2010

Ficha: Arado Ar 68


Arado Ar 68

Origen: Arado Handelsgesellschaft, Warnemünde.

Tipo: Caza monoplaza.

Motor: Un motor BMW VI de 12 cilindros en V, refrigerado por liquido y de 750 caballos.

Dimensiones: Envergadura, 11m ; longitud, 9,5 m; altura, 3,3m

Pesos: Vacio,1500 kg; cargado, 200 kg.

Prestaciones: Velocidad máxima a 4000 metros, 210 Km/h; techo de servicio, 7.400 m; alcance con carga operacional, 550 Km.

Armamento: Dos ametralladoras MG 17 de 7 ,92 mm sobre el motor; Soportes para seis bombas de 50 Kg.

Historial: Primer vuelo en noviembre de 1933, a finales de 1937 finaliza la producción. Cave mencionar que fue uno de los primeros cazas producidos en la Alemania nazi cuando esta abandonó las restricciones impuestas por el Tratado de Versalles e inicio su rearme.

La Luftwaffe ( Fuerza aérea Alemana) después de la 1ª guerra mundial ( 1ª parte)


El día 11 de noviembre de 1918 después de cinco años de guerra, Alemania no tuvo más remedio que aceptar un armisticio.

Los aliados no querían un resurgir alemán y con la firma del Tratado de Versalles imponían a la Alemania perdedora unas serie de sanciones, entre otras: concesiones territoriales a favor de los aliados, desarme de su ejército, indemnizaciones económicas, y en lo referente a su fuerza aérea le “cortaban las alas”, teniendo esta que entregar todos los aparatos. Antes de la firma del tratado, Alemania tenía que entregar en buenas condiciones 1700 aviones de caza y bombardeo, por citar algunos: los famosos Fokker en sus diferentes versiones, los Albatros, Pfalz y Halberstand, pero estas cifras nunca llegaron a cumplirse.

En Diciembre de 1918 el nuevo gobierno anuncio que se había cumplido lo acordado, pero según los aliados solo se habían entregado unos 500 aparatos (entre cazas y bombarderos) y unos 50 hidroaviones. A pesar de la disolución oficial de la fuerza aérea alemana en enero de 1919 Alemania aun disponía de unos 7000 aviones y ninguna intención de ceder ningún aparato. Todo esto cambió en junio de 1919 cuando a la delegación alemana les presentaron los términos del tratado de Versalles, obligándose a firmar, dándoles de plazo tres meses. Por parte de Alemania, hubo un intento de conservar escuadrones activos poniendo como escusa el apoyo a la policía civil, pero de nada sirvió. De hecho hasta la aviación civil tuvo sus limitaciones en cuanto a velocidad, altura de vuelo y alcance operativo.

A raíz de estas limitaciones la industria aeronáutica Alemana era casi inexistente, pero hubo intrépidos que optaron por el desarrollo y la investigación de los planeadores, y de las alas volantes siendo los hermanos Horten unos de los pioneros en este tipo de aeronave (en posteriores artículos tocaremos este tema)

Jesús Reina


Fokker Dr. I

Fokker E III

Halberstand D II

Albatros D I

domingo, 24 de octubre de 2010

Blondi, el perro de Adolf Hitler


Blondi nació en el año 1941 y falleció el 30 de abril de 1945. Fue conocido por ser el perro pastor alemán de Adolf Hitler, regalado en 1941 por Martín Bormann. Blondi estuvo con Hitler incluso después de que se trasladara a su bunker subterráneo en enero de 1945.

Entre marzo y principios de abril (aparentemente el día 4) de 1945, tuvo una cría de cinco cachorros con el pastor alemán de la arquitecta allegada al führer Gerdy Troost, Harras. Hitler bautizó a uno de los cachorros como Wolf y lo entrenó personalmente.

Uno de los cachorros de Blondi fue reservado para la hermana de Eva Braun, es decir, Gretl. La mujer del líder, Eva, envió a Gretl una carta con una foto de Blondi y tres de sus cachorros, estando el de Gretl marcado con una flecha.

Hitler era muy afectuoso con Blondi, manteniéndola a su lado y dejándola dormir en la habitación de su bunker, afecto que no era compartido por Eva Braun, quien prefería sus dos perros Terrier Escocés llamados Negus y Stasi (o Katuschka). De acuerdo con la secretaria de Hitler, Traudl Junge, Eva odiaba a Blondi y la pateaba por debajo de la mesa.

En mayo de 1942, Hitler compró otro ovejero alemán “a un oficial menor en la oficina de correos de Ingolstadt” para que Blondi tuviera compañía. La llamó Bella.

Como soldado en la primera guerra mundial, Hitler tuvo gran aprecio por un Bull Terrier blanco llamado Fuchsl y quedó perturbado cuando lo perdió. Obtuvo también otro ovejero alemán llamado Prinz en 1921, durante sus años de pobreza, pero fue obligado a abandonarlo en una perrera. De todas formas, el perro logró escapar y volver con él. Hitler, que adoraba la lealtad y obediencia del perro, desarrolló un gran gusto por la cría. También tuvo un ovejero alemán llamado Muckl.

Antes de Blondi, Hitler tuvo dos perras ovejero alemán, madre (nacida en 1926) e hija (nacida en 1930) ambas llamadas Blonda. En algunas fotos de 1930, Blonda (la hija) es incorrectamente etiquetada como Blondi.

Blondi fue envenenada por un miembro de las SS en la mañana del 30 de abril de 1945 por orden de Hitler, que deseaba comprobar la efectividad de las cápsulas de cianuro que le habían sido facilitadas por su médico personal.

Publican lista de 20.000 obras de arte robadas por los nazis, incluyendo Picasso y Goya

Varias organizaciones judías han creado y puesto hace unos días a disposición del público un inmenso archivo digital con más de 20.000 obras de arte incautadas por los nazis, entre las que se encuentran decenas de piezas de Picasso y Goya, entre otros muchos.

Con la elaboración de esta base de datos, las organizaciones judías pretenden facilitar el regreso a los propietarios originales de las obras incautadas por los nazis en Francia y Bélgica durante la II Guerra Mundial, entre 1940 y 1945.

Detrás de este trabajo, que se puede visitar en la web 'www.errproject.org/jeudepaume', se encuentran el Museo estadounidense del Holocausto, situado en Washington, y la "Conferencia sobre reclamos materiales judíos contra Alemania", con sede en Nueva York.

Hasta ahora, existían varios listados, entre ellos el ubicado en los Archivos Nacionales de EEUU y en los Archivos Alemanes, pero no existía una única base de datos con el nombre y descripción de los objetos robados, y algunos de ellos incluso con fotografías.

Para su trabajo, estas organizaciones contaron con la ayuda del propio régimen nazi, que dejó como herencia un exhaustivo listado de las obras incautadas por la Einsatzstab Reichsleiter Rosenberg, la unidad militar del Tercer Reich dedicada a esta labor.

De hecho, la identificación de las obras fue posible gracias a los documentos que los nazis procesaron en Jeu de Paume, el edificio ubicado en los Jardines de las Tullerías, en París, donde se almacenaban las obras antes de ser vendidas o repartidas entre los altos oficiales del Reich, según explican las organizaciones en su página web El listado online, al que se puede acceder desde hoy, contiene un amplio listado de las obras que fueron arrebatadas a los judíos, entre ellos piezas de Vermeer, Rembrandt y Leonardo.

En el listado también se incluyen más de 80 piezas de Picasso, una veintena de Goya, varios de Miró y uno de Dalí.

No obstante, las organizaciones explican que este listado incluye solo una pequeña parte de los cerca de 650.000 trabajos que fueron robados a las familias, a galeristas y a coleccionistas judíos tras la invasión de Francia.

Muchas de las obras han podido ser devueltas, pero "miles de ellas siguen desaparecidas", explican las organizaciones.

En declaraciones a la cadena BBC, el presidente de la Conferencia, Julius Berman, dijo que "ahora es responsabilidad de los museos, de las galerías y de las casas de subasta comprobar las piezas que poseen, para determinar si se trata de arte robado a las víctimas del Holocausto".

Un informe revela los planes nazis para quitar la nacionalidad a Thomas Mann

El padre del ex presidente alemán Richar von Weizsäcker (1981-1984), el diplomático Ernst von Weizsäcker, recomendó en 1936 retirar la nacionalidad al escritor Thomas Mann, según un informe de la implicación del Ministerio de Exteriores en el Holocausto que revela hoy el diario "Frankfurter Allgemeine".

Según el informe de una comisión de investigación creada en 2005 cuando el ecologista Joschka Fisher era ministro de Exteriores, Ernst von Weizsäcker, que fue secretario de Estado a partir de 1938, recomendó dos años antes desterrar a Mann a causa de su propaganda contra el régimen nazi.

Mann, autor de "La Montaña Mágica", "Muerte en Venecia" y "Los Buddenbrook", partió al exilio en Suiza en 1933 para posteriormente viajar a Estados Unidos, donde combatió al nazismo con sus alocuciones desde la radio.

El informe, que publicará también el lunes el semanario "Der Spiegel", recoge que "el Ministerio de Exteriores alemán fue una organización criminal" en los años del nazismo (1933-1945) en la persecución de los judíos, según el presidente de la comisión, el historiador Eckart Conze.

Contra lo que asegura el informe, el ex presidente Weizsäcker afirma en el "Frankfurter Allgemeine Zeitung" que su padre "nunca fue una figura relevante del nazismo y su papel en el Ministerio de Exteriores fue ejemplar para mantener la tranquilidad en esos tiempos de cambios en Europa".

Ernst von Wezsäcker fue sometido a juicio por crímenes contra la Humanidad en los procesos a prebostes nazis entre 1948 y 1949 y condenado a cinco años de cárcel.

"El Ministerio de Exteriores funcionó como una institución del régimen nacionalsocialista desde el primer día y participó en la política de violencia instaurada por el Tercer Reich", señala Conze.

El estudio revela que después de 1945 "continuaron en el Ministerio personas que tuvieron una seria implicación en el régimen nazi", añade Conze.

El propio ex ministro Fischer se muestra "sorprendido" en el periódico del papel de "protector de criminales" que tuvo el Ministerio después de 1945.

También su sucesor en el cargo, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, afirma no poder "creer" la implicación de los diplomáticos en la eliminación sistemática de judíos y su posterior protección de los criminales.

Denuncian al estado húngaro y a dos compañías por colaborar con los nazis

Supervivientes húngaros del Holocausto y familias de las víctimas han denunciado este jueves a la República de Hungría y a sus dos compañías ferroviarias, a las que acusa de colaborar con el régimen nazi para la exterminación de los judíos durante la Segunda Guerra Mundial. La denuncia ha sido presentada ante un tribunal de Columbia (Estados Unidos).

Según los denunciantes, el Gobierno húngaro y las dos empresas confiscaron propiedades de ciudadanos judíos y les trasladaron hasta los guetos y campos de concentración, donde murieron cientos de miles de personas de Europa del Este.

"Las víctimas judías del Holocausto húngaro solo piden lo que se les debe: compensación y restitución por las atrocidades que sufrieron a manos de los acusados", se lee en la denuncia. Se han identificado al menos a 300 supervivientes que podrían beneficiarse de las compensaciones, aunque existe la posibilidad de que superen los 5.000.

viernes, 22 de octubre de 2010

La fórmula que ayudó a ganar una guerra

Se dice en clave de humor, que la estadística es la ciencia según la cual, si tu tienes dos gallinas y yo ninguna, ambos tenemos una gallina. Pero la historia que rescatamos hoy en la web, va mucho más allá que la simple diversión y especulación. El relato, publicado hace unas horas en «The Guardian» y al que hemos llegado vía Menéame, habla del ingenio de los aliados durante la Segunda Guerra Mundial, para formular una estadistica que resultó clave en la victoria final.

Aunque sobre el terreno, los tanques anglosajones se habían mostrado superiores a los "Panzer" alemanes, los aliados estaban preocupados por la respuesta que ofrecerían los nuevos modelos "Mark IV" y "V" del frente nazi, tanto a nivel cualitativo como cuantitativo. Conseguir estimar el número de unidades que podía producir el enemigo al año, podía resultar, sin duda, una estrategia básica para el desarrollo de la contienda.

Los servicios de inteligencia de los países aliados trataban de hacer sus cábalas a través del recuento de tanques en cada una de las batallas y la observación directa de las unidades que salían de las principales factorías alemanas, pero en muchos casos las cifras resultaban contradictorias y es entonces cuando decidieron echar mano de la lógica y la estadística.
Lógica, porque conociendo la cuadriculada y organizada mentalidad alemana, lo normal es que cada uno de los tanques llevara un número de serie ascendente respecto a histórico de producción y así fue. Y estadística, porque conocido este hecho, los matemáticos tenían una valiosa información con la que jugar: los números de serie de los "Mark V" capturados. Dicho y hecho, la fórmula estadística utilizada para descubrir el número de unidades enemigas fue relativamente fácil:

Los tanques alemanes estaban numerados de 1 a N (1,2,3... N). Imaginando que hubieran capturado 6 tanques con numeros de serie: 18, 27,41,73, 87 y 98, ahora tenian una muestra de 6 tanques con un numero de serie maximo de 98. Llamando a el tamaño de la muestra S y el numero maximo M y despues de experimentar con otras series -de tanques, vehiculos, aviones- los matematicos encontraron una buena estimacion del numero de tanques en la ecuacion: (M-1)(S+1)/S. En el ejemplo dado seria: (98-1)(6+1)/6 = 113,16, esto es, en nuestro ejemplo se habrian producido 113 tanques.

Aunque los espías estimaban que los alemanes habían producido unos 1400 tanques al mes entre junio de 1940 y septiembre de 1942, la famosa fórmula revelaba otra cifra a los matemáticos: 246 tanques. Una vez finalizada la gran guerra y conocidos los datos reales sobre produccion de tanques de las fabricas nazis se obtuvo que durante ese tiempo la producción fue de 245 unidades al mes. Precisión casi milimétrica.

Berlín expone las fotos privadas del primer comandante nazi de Sachsenhausen

Berlín acoge una exposición basada en el álbum fotográfico personal de Karl Otto Koch, el primer comandante que estuvo al frente del campo de concentración de Sachsenhausen, y que permite profundizar en las aterradoras ideas y actividades llevadas a cabo por el criminal nazi.

Sacadas de los archivos de los servicios secretos rusos de Moscú, se muestran alrededor de 100 fotografías, de las más 460 que contiene el álbum, y que documentan la trayectoria de Otto Koch, quien se ocupó de diferentes campos de concentración a lo largo de su vida.

En 1936, en el mismo año en el que Hitler mostraba al mundo su mejor cara a través de los juegos olímpicos de Berlín, en el pueblo de Oranienburg, 35 kilómetros al norte de la capital, comenzaba a funcionar el campo de concentración de Sachsenhausen liderado por Koch.

Con el título de "Sachsenburg a Sachsenhausen", la muestra ofrece, además de las fotos en formato original del álbum, ampliaciones de algunas de ellas con explicaciones de expertos y personas que pasaron por los campos y sobrevivieron a ellos.

A través de las instantáneas y los paneles, los visitantes pueden conocer cuál fue el día a día del comandante y los diversos trabajos que se le encomendaron.

Así, se muestra cómo fue el encargado de liderar la construcción del campo de Sachsenhausen, para lo que se utilizó la mano de obra de prisioneros y se talaron gran cantidad de árboles a escasos kilómetros del pueblo más cercano.

Koch no sólo tenía que construir las casetas para los judíos, homosexuales y otra víctimas nazis que acabarían encerrados en ellas, sino también tenía el encargo de levantar los edificios necesarios para que pudieran residir los soldados encargados de la vigilancia.

En el álbum de fotos, que se cree le fue regalado por su 40 cumpleaños, no aparecen imágenes violentas pero sí humillaciones a varios de los prisioneros.

Puede verse en algunas de las fotos cómo los soldados seleccionan a los presos para hacer bromas comparando al "más alto con el más bajo", poniéndoles prendas mal colocadas a propósito, o burlándose de ellos.

Entre las imágenes también se sitúan algunas de las fiestas organizadas por Koch, en las que los excesos de alcohol eran la tónica general, según las explicaciones adjuntas.

Tras su trabajo en Sachsenhausen, el comandante, que fue conocido como uno de los "más brutales matones" de las SS, fue requerido para construir otro campo de concentración, el de Buchenwald, y más tarde acabó de comandante en el de Majdanek.

En todos los campos de concentración en los que trabajó Koch murieron cientos de miles de personas.

Koch fue ejecutado en abril de 1945, después de ser declarado culpable en un escándalo de corrupción.

La exposición, inaugurada esta semana y de entrada gratuita, podrá visitarse hasta el próximo 27 de febrero en una de las salas de la "Topografía del Terror" de Berlín.

Hallan restos de 51 soldados japoneses de la Segunda Guerra Mundial

El hallazgo fue dado a conocer a última hora del jueves, pero el equipo especial encargado de recuperar los cuerpos de los soldados muertos en esa isla, conocida también como Iwojima, presentará su reporte este viernes al primer ministro Naoto Kan.

Los restos estaban enterrados en dos lugares de la isla, en ubicaciones similares a las indicadas en documentos de Estados Unidos como sitios de entierro, en uno de los cuales habría cerca de dos mil cuerpos y en otro más de 200, indicaron fuentes oficiales.

La posibilidad de que los sitios de entierro existan en la isla ha aumentado tras ese descubrimiento, sin embargo tales lugares no han sido descubiertos aún, de acuerdo con despachos de la agencia local de noticias Kyodo.

El equipo excavó en dos lugares, uno cerca de una pista de lo que fue una base de las fuerzas aéreas japonesas en la parte central de la isla, y otro al pie de la montaña Suribachi en la región sur de la ínsula.

Las excavaciones iniciaron el pasado día 6 de este mes sobre la base de documentos de la Administración Nacional de Archivos y Documentos de Estados Unidos, que refieren dos sitios como "cementerios enemigos", señalaron las fuentes en rueda de prensa.

Explicaron que aunque sólo fueron encontrados 51 cuerpos, al parecer los sitios corresponderían a los lugares descritos en los documentos debido a que la forma en que se hallaban los restos sugiere que habrían sido enterrados deliberadamente.

Las excavaciones continuarán, pero es probable que el número total de cuerpos hallados será confirmado hasta finales de este año o principios del próximo.

Alrededor de 22 mil soldados japoneses murieron en Iwoto durante la guerra, de los cuales sólo 50 han sido hallados en la última década en lo que fueron refugios subterráneos.

jueves, 21 de octubre de 2010

Carpintero que intentó matar a Hitler tendrá monumento


La ciudad estado de Berlín reveló un plan para erigir el año próximo una figura de acero de 17 metros con la cara de Georg Elser en el distrito central de Mitte, en la calle que alojó la cancillería de facto de Hitler.

"Homenajear a Georg Elser cerca del centro de poder del Tercer Reich es un acto de dignidad y representa un triunfo tardío", dijo el secretario de Cultura del estado de Berlín, Andre Schmitz.

Elser escondió una bomba dentro de un pilar en una cervecería en Munich en donde iba a hablar Hitler el 8 de noviembre de 1939 por el aniversario del Putsch (golpe) de 1923, cuando el Führer, nacido en Austria, intentó por primera vez tomar el poder. Pero como había niebla, Hitler se volvió en tren a Berlín en vez de en avión.

Ello implicó que partiera de la cervecería 13 minutos antes de que explotara la bomba. Elser fue detenido en la frontera con Suiza esa misma noche, llevado a un campo de concentración y finalmente asesinado en Dachau el 9 de abril de 1945, semanas antes del fin de la Segunda Guerra Mundial.

El artista berlinés Ulrich Klages diseñó el monumento como parte de una competencia europea llamada "Memorial en Berlín para el Asesino de Hitler", en la que salió ganador. El monumento será inaugurado el 8 de noviembre del 2011, en el 72 aniversario del intento de asesinato.

martes, 19 de octubre de 2010

Hans Kielson, centenario judío alemán triunfa con una novela de hace 63 años

Próximo a cumplir los 101 años, el judío alemán Hans Keilson, que combatió desde Holanda al régimen de Hitler, verá publicada por primera vez en Inglaterra una novela que escribió hace 63 años y que ahora triunfa en Estados Unidos.

Hace unas semanas, la crítica estadounidense incluyó a Keilson, que era hasta entonces prácticamente desconocido, como "uno de los grandes escritores del mundo".

El libro, titulado en su versión inglesa "Comedy in a Minor Key" y que publicará la editorial británica Hesperus Press, es un relato casi autobiográfico de personas normales que desafiaron a aquel régimen tiránico.

En Estados Unidos, la novela se convirtió en un "best-seller" junto a otra obra suya casi olvidada sobre la psicología del odio racial y la tiranía, titulada "The Death of the Adversary", escrita hace medio siglo.

Ambas novelas las ha publicado en Estados Unidos la editorial Farrar, Straus y Giorux (FSG), que le describe como heredero nada menos que de Joseph Roth y de Franz Kafka.

El New York Times, tampoco escatimó elogios, recomendó su lectura y dijo que quienes le lean, le añadirán a la lista de los "más grandes" de la literatura.

Preguntado por el diario británico The Guardian por ese tardío reconocimiento, Keilson se declaró "feliz de ser testigo de todo esto".

Hans Keilson comenzó ambas novelas en la clandestinidad y tuvo que poner cincuenta páginas a buen recaudo hasta después de la Segunda Guerra Mundial.

"Comedy in a Minor Key" trata de una pareja holandesa que oculta a un judío durante la ocupación y de cuyo cadáver tratan de deshacerse cuando aquél muere de pulmonía.

El libro está dedicado a un matrimonio holandés, los Reintsmas, que ocultaron en su día al autor.

Éste había huido a Holanda después de que los nazis prohibieran su primera novela tras tacharla de libro judío.

Su editor de entonces, Fischer Verlag, le aconsejó que abandonara cuanto antes Alemania, porque peligraba su vida.

Keilson se tomó en serio aquel aviso y se unió a la resistencia holandesa. Sus padres murieron en el campo de exterminio de Ausschwitz.

Después de la guerra, Keilson trabajó en Holanda, donde aún vive, como psiquiatra y fue uno de los pioneros del tratamiento del trauma de la guerra en los niños.

Su éxito tardío en el mundo anglosajón se debe a su descubrimiento por un traductor llamado Damions Searls, que encontró entre las gangas de una librería austríaca la vieja edición alemana (1947) de "Comedy in a Minor key" y valoró sus cualidades literarias.

Berlín recrea el comienzo de los Juicios de Nuremberg

El Tribunal Cameral de Berlín recreó hoy el momento histórico que dio paso a los Juicios de Nuremberg, con la exposición del pliego de la acusación instruido el 18 de octubre de 1945, preámbulo del proceso abierto un mes después contra la cúpula del Tercer Reich en la ciudad que fue sede de los congresos nazis.

"En esta sala de Berlín, la justicia nazi procesó y condenó a muerte a un centenar de conjurados contra Hitler en 1944. De aquí partió la acusación con la que se enjuició a 24 responsables del nazismo, en Nuremberg", explicó Monika Nöhre, presidenta de esa Cámara, en el aniversario de la presentación del pliego formal.
La sala del Tribunal fue exponente de ambos capítulos históricos: por un lado, la placa que recuerda al centenar de miembros de la resistencia ejecutados tras el atentado fallido contra Hitler, el 14 de julio de 1944; por el otro, el documento con la acusación contra los jerarcas nazis, ese día de octubre de 1945.

La placa en honor a los conjurados -la mitad de los apellidos corresponden a la aristocracia alemana, como Berthold Schenk Graf von Stauffenberg, hermano mayor de Claus, el oficial nazi que encabezó la conspiración- tenía esta vez un papel secundario, ya que el protagonismo correspondía al pliego.
Conspiración contra la paz mundial.

Enfundada en guantes de plástico azul, Juliana Rangel, directora del Archivo de la Corte Penal Internacional de La Haya, sostenía bajo los flashes de las cámaras el documento en el aniversario de la sesión, que presidió el general soviético Iola Nikitchenko. Entonces, los cuatro fiscales principales leyeron la acusación contra los 24 acusados, de Hermann Göring a Rudolf Hess, a los que se les imputaban crímenes de guerra, crímenes contra la Humanidad, conspiración contra la paz mundial, entre otros cargos.

Por su parte, todos los enjuiciados se declararon no culpables. "Fue una sesión única, ya que los aliados decidieron trasladar el juicio a Nuremberg, un escenario de alta simbología nazi", explicó Stefan Franke, presidente del Tribunal Territorial de esa ciudad del sur de Alemania, que entre 1933 y 1938 acogió los congresos del partido nazi.

Las razones para el traslado fueron tanto de orden simbólico como práctico, añadió Franke, recordando que Berlín era una ciudad de administración compleja, bajo tutela de las cuatro potencias aliadas. La histórica Sala 600 del Tribunal de Nuremberg donde se celebraron las 218 vistas del proceso contra la cúpula nazi se abrirá como "Memorial de los Juicios de Nuremberg" el 21 de noviembre, coincidiendo con el 65 aniversario de la apertura de estos juicios.

Funcionará como memorial los días en que no haya procesos, precisó Franke, puesto que, además de escenario para la historia funciona como Audiencia. "Es, junto a un escenario histórico, una cámara judicial activa. Un lugar para reflexionar sobre la historia sin perder de vista el presente", explicó su presidente. Contará con una superficie de 750 metros cuadrados, con una exposición permanente sobre ese primer gran juicio del Tribunal Militar aliado, que culminó con la lectura de las sentencias el 1 de octubre de 1946, entre ellas once penas de muerte.

Se documentarán asimismo los doce procesos posteriores, que en esa misma Sala 600 y entre 1945 y 1949 se celebraron contra médicos, juristas, miembros de las SS, policías, banqueros, industriales, militares y altos funcionarios, como responsables directos o como cómplices del nazismo.

Los encargados de administrar justicia seguían siendo tribunales aliados. Los primeros grandes juicios contra los crímenes del nazismo abiertos por la justicia alemana fueron los llamados "Procesos de Auschwitz" instruidos por el fiscal Fritz Bauer, entre 1963 y 1965.

Un registro de obras robadas por los nazis

Los nazis robaron –principalmente a familias judías– cientos de miles de obras de arte durante la Segunda Guerra Mundial. Desde ayer, está a disposición de cualquier usuario una base de datos en Internet con más de 20.000 obras que los nazis saquearon en Francia y Bélgica entre 1940 y 1944. Buena parte de ellas habían sido catalogadas y guardadas por los nazis en el museo Jeu de Paume durante la ocupación de Francia. Entre ellas hay pinturas de Monet, Chagall y Picasso.

El sitio www.errproject.org/jeudepaume, que incluye fotos de las obras y la identidad de sus dueños, fue publicado por la “Conferencia sobre reclamos materiales judíos contra Alemania” y el Museo estadounidense del Holocausto.

El trabajo iniciado en 2005 consistió en digitalizar las fichas del ERR (Einsatzstab Reichsleiter Rosenberg), la agencia encargada de confiscar los bienes a los judíos en los territorios ocupados por Alemania durante la guerra, informó la agencia AFP. La base de datos combina registros del Archivo Nacional de Estados Unidos, el Bundesarchiv alemán y archivos del gobierno francés. “La mayoría de la gente piensa que la mayoría de estas piezas habían sido repatriadas o recuperadas, pero más de la mitad nunca se repatriaron”, explicó Wesley A. Fisher, director de investigaciones de la Conferencia de Reclamo.

El director del proyecto en el Museo del Holocausto, Marc Masurovsky, señaló que la base de datos fue diseñada para incluir nueva información a medida que aparezca. “Espero que las familias (de sobrevivientes) la consulten y nos digan lo que está bien y lo que está mal”, se ilusionó.

En junio de 2009, 46 países firmaron en Praga la “Declaración de Terezin”, por la que se comprometieron a continuar con el proceso de reparación de las expoliaciones sufridas por los judíos durante el régimen nazi.

lunes, 18 de octubre de 2010

Nueva sección y nuevo colaborador

Gracias a la publicación de la reseña de 2GM Blog en la revista "La Aventura de la Historia" he tenido la gran suerte de entrar en contacto con Jesús Reina.

Jesús es un gran afcionado y entendido del mundo de la aviación, y han basta un par de mails para conectar y cerrar un acuerdo de colaboración mediante el cual Jesús nos ofrecerá periódicamente una serie de artículos relacionados con los cazas, bombarderos, transporte de tropas... y todos las demás neves que de una forma u otra se vieron involucrados en la Segunda Guerra Mundial.

Os dejo a continuación su artículo de presentación... y nos quedamos ansiosos a la espera de su primer post especializado.


"Una muerte es una tragedia, un millón de muertes es una estadística".

Esta es una de las muchas frases celebres recitadas por los protagonistas de una de las mayores contiendas que han existido, con más de 40 millones de muertos y un despliegue de medios humanos y materiales sin precedentes….

He elegido esta frase porque aun hoy en día, creo que no somos conscientes de la envergadura de la contienda y, cifras como 40,50,60 millones suenan en nuestros oídos como “una estadística más”. Mi nombre es Jesús Reina, y como la mayoría de vosotros un aficionado más a la historia, especialmente a la segunda Guerra Mundial.

Hace unos días descubrí 2GM Blog y la verdad es que me pareció un blog muy interesante y una magnifica forma de divulgación de una de las mayores historias de nuestra era. Aparte de la historia, una de mis mayores aficiones es el mundo de la aviación, y dentro de ésta me interesa mucho sus comienzos así como la 1ª y la 2ª GM, así me surgió la idea de poder colaborar en este blog aportando artículos relacionados con la aviación en la 2 GM, Pearl Harbor, Midway, Desembarco de Normandía, estas y otras muchas batallas serán tratadas, así como sus principales protagonistas: aviones como el Spitfire, Messerschmitt Bf 109, Zero, Mig-1,etc.

Espero vuestra participación mostrando vuestros comentarios así como sugerencias y peticiones, gracias a cero91 por incluir mis comentarios en su blog, un saludo y buenos vuelos…


Jesús Reina

Una famosa foto de Hitler podría ser una falsificación


La famosa fotografía hecha en Múnich por Heinrich Hoffmann, que muestra a Adolf Hitler entre unos manifestantes durante una demostración de apoyo a la Primera Guerra Mundial, podría ser una falsificación.

Esta imagen fue utilizada por primera vez para demostrar el patriotismo del líder fascista en 1932 cuando aparecieron críticas a Hitler por haber escapado del servicio militar en 1908. Posteriormente esta fotografía llegó a convertirse una de las más famosas e incluso se empleaba en los centros de educación.
Ahora podría resultar que esta fotografía es una falsificación. El historiador alemán Gerd Krumeich encontró en los archivos del fotógrafo otra variante de la misma imagen en la que el pelo de Hitler era distinto. Este hallazgo le hizo pensar que la foto fue retocada con el fin de utilizarla para la propaganda alemana. Además, no se encontró a nadie parecido al 'Führer' en otras fotografías de la manifestación.

El descubrimiento coincide con la inauguración de la exposición 'Hitler y los alemanes. Comunidad y Crimen'. El Museo de Historia de Alemania muestra en Berlín más de 400 fotografías y retratos de altos dirigentes de aquella época, carteles, uniformes, tablas con las proporciones de la raza aria y otros objetos de la propaganda fascista. En una de las salas se exponen objetos personales de Hitler.
La exposición misma ha provocado polémica en Alemania.

Murcia sirvió de escenario de la recreación de la Batalla de Arnhem

Doscientos recreadores históricos y una veintena de vehículos participaron hoy en Murcia en la reconstrucción de la batalla de Arnhem (Holanda), el mayor fracaso militar de los Aliados en la Segunda Guerra Mundial, presenciada por miles de personas en la Avenida Teniente Flomesta y en la plaza de Cruz Roja.

La Operación Market Garden, que era como se conoció esta contienda militar, tuvo lugar el 17 de septiembre de 1944 y concluyó el día 26 cuando los alemanes tomaron posición de ambas orillas del Rhin, en este caso el río Segura, dando por concluida la batalla.

En esta ocasión una brigada paracaidista del Ejército de Tierra español efectuó un lanzamiento que puso punto y final a estas jornadas, iniciadas ayer con varias demostraciones bélicas de diferentes épocas de la historia, en el Malecón de Murcia.

La invasión recreada hoy es la primera que se hace en una capital española y en la misma participaron personas con la vestimenta de la Primera División británica "Airborne", la 101 y 82 división aerotransportadas americanas y el 30 Cuerpo de Ejército Británico, así como de la 9ª División Panzer SS Hohenstaufen y la décima división Panzer SS Frundsberg, componentes del Segundo Cuerpo de Ejército SS alemán.

La Operación estuvo planeada para dar el golpe definitivo a Alemania que pusiera fin a la guerra en 1944, si bien los Aliados fracasaron en retener una cabeza de puente sobre el Rhin, en este caso el Puente Nuevo de Murcia, donde transcurrió gran parte de la recreación que cautivó al público asistente de todas las edades.

Los grupos participantes llegaron desfilando desde sus campamentos al lugar de operaciones durante una recreación en la que abundaron los efectos especiales y de sonido que hicieron que fuera un espectáculo para los asistentes, informó a EFE el portavoz del evento, el periodista Guillermo Hermida.

Poco antes de la recreación, el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, depositó una corona de laurel en el jardín de Floridablanca en honor de los caídos en los distintos conflictos a lo largo de la historia.

Doce mil personas participaron ayer en el Malecón en estas jornadas denominadas "Murcia Revive la Historia de Cine", organizadas por la asociación de recreación "Codex Belix".

viernes, 15 de octubre de 2010

El Centro Cultural Santa Catalina recrea la Segunda Guerra Mundial

Juan José Pantoja Soriano, miembro de la Asociación de Modelismo y Miniaturismo Histórico de Conil, nos vuelve a dejar con la boca abierta un año más… y ya van tres.

En esta ocasión, Juan José Pantoja se vuelca en mostrarnos algunas de las batallas más decisivas de la cruenta Segunda Guerra Mundial de mediados del siglo pasado. Este artista ha convertido, y hasta el próximo 6 de noviembre, el Centro Cultural Santa Catalina de Conil en un campo de batalla visual, más de 900 figuras y alrededor de 140 objetos que nos trasladan al mayor conflicto bélico que ha conocido, por desgracia, la Humanidad.

Stalingrado, Iwo Jima o el Desembarco de Normandía casi cobran vida en esta magnífica e imponente exposición que, sería una aberración no decirlo, nadie debería perderse porque realmente merece la pena
Mapas de la época, material sanitario, uniformes originales, cartas privadas de aquellos años, revistas, bomba de desinfección alemana, una radio norteamericana de la época encontrada en una casa de Conil, centralita de morse, medallas, monedas, objetos de soldados rusos, americanos…, palas americanas, postales de 1949, una fantástica colección de aviones en miniatura, también de la época, cedida para esta muestra por Juana María Costales Pérez, viuda de Manuel rosado Guerrero, y un largo etcétera de artilugios…componen la magnífica exposición de maquetas en miniaturas y objetos de la época.

Esta es la tercera exposición que realiza en Conil Juan José Pantoja, la primera fue la Batalla de La Barrosa, la siguiente trató del Imperio Romano y la próxima que tiene en mente tratará sobre los 1.300 años de invasión musulmana en la península. La mayoría de los objetos son propiedad de él, asimismo destacar que desde la inauguración de esta muestra de miniaturismo y maquetismo, el pasado día 8, han pasado ya más de mil personas.

Asimismo, desde la Delegación Municipal de Cultura y Educación se han puesto en contacto con los responsables de estas áreas de los municipios de comarca de La Janda para que dicha muestra se pueda exponer en otras localidades cercanas.

Un poco de historia...
La Segunda Guerra Mundial fue el conflicto más grande y destructivo de toda la Historia de la Humanidad. Implicó a 70 paises y causó más de 40 millones de muertos y otros cuarenta de heridos y desplazados de sus hogares.
Las causas principales fueron los contenciosos territoriales que se plantearon después de la I Guerra Mundial tras la Paz de Versalles; la Crisis Económica Mundial de 1929; y, sobre todo, el surgimiento de regímenes totalitarios y fascistas como Alemania, Japón e Italia, que formaron un ‘Eje’.

La devolución del Sarre en 1933, la militarización de Renania, la anexión de Austria a Alemania en 1938 y la reclamación del territorio checo de los Sudetes terminó en 1939 con la total invasión de Checoslovaquia por los soldados alemanes.

El 1 de septiembre de 1939, Hitler ordenó la invasión de Polonia, y el día3, Gran Bretaña y Francia declaraban la guerra a Alemania.

Tras sucesivas invasiones por parte d Alemania y cruentas batallas desde el 1939 al 1945, los aliados cambiaron el destino de la Guerra y en marzo de 1945, cruzaron el Rhin y los soviéticos el Oder. Y en abril, el general Patton llegaba al Elba.

Hitler, cercado por el ejército soviético del general ruso Zhukov que entró en Berlín y conociendo la situación, se suicidó el 2 de mayo, y su Mariscal Jodt, firmó la rendición incondicional en Reims, el 7 de mayo de 1945. El 6 de agosto se lanzó la bomba atómica sobre Hiroshima. El 16 de agosto, se rinde Japón.
Un conflicto que no podemos olvidar.

En la sala central del Centro Cultural están ubicadas cuatro maquetas, con todo lujo de detalles, donde reflejan la batalla en 1942 El Alamein [El desierto como escenario. El Mariscal Montgomery Comandante del 8º Cuerpo del Ejército Británico frente a Rommel, llamado ‘El zorro del desierto’, con su ejército italoalemán de 104.000 hombres, 489 carros de combate, 675 aviones y 1.219 cañones, contra la superioridad inglesa de 195.000 soldados, 1.029 carros de combate, 750 aviones y 2.311 cañones. La escasez de medios y refuerzos llevó a la retirada de las fuerzas del Eje y decidió el rumbo de la guerra en África]; la Batalla de Stalingrado (1942) [Se desarrolló durante la ofensiva alemana contra Rusia, en torno a la ciudad portuaria industrial de Stalingrado a lo largo de 50 kilómetros. A orillas del volga, una larga y cruenta batalla en extremas condiciones, donde se enfrentaron 250.000 alemanes y aliados contra más de un millón de soviéticos, supuso la muerte de 60.000 alemanes y 110.000 prisioneros y más de 750.000 muertos soviéticos, dio lugar a la rendición del mariscal Von Paulus y con ello la importancia que supuso en el contexto de la II Guerra Mundial]; el Desembarco de Normandía (1944)[Normandía, playas del norte de Francia. ‘Operación Overlord’. Llamado por los Aliados, el mayor desembarco de la historia: 722 naves de guerra, 4.266 naves de transportes, 10.521 aviones y 176.000 hombres, contra medio millón de soldados alemanes, algunos centenares de carros de combate, 42 submarinos y 300 aviones. Los alemanes sufrieron entre heridos y desaparecidos, 300.000 y 30.000 muertos, frente a los 45.000 muertos de los Aliados y 173.000 heridos y desaparecidos. Fue el golpe definitivo a la Alemania nazi que aceleró el final de la II Guerra Mundial], y la Conquista de la isla de Iwo Jima (1945) [ La conquista de la isla de Iwo Jima contribuyó a la definitiva derrota de Japón. Un mes de combates cuerpo a cuerpo entre japoneses y americanos. Su guarnición japonesa de 22.000 hombres se enfrentó al desembarco de 70.000 marines. Los cañones de sus barcos, los aviones y toda clase de vehículos y carros de combate, el General nipón Kuruibayashi impuso un alto tributo de sangre, su guarnición fue exterminada tan sólo 200 prisioneros, los americanos recogían 26.000 hombres entre muertos y heridos. El 23 de febrero, los americanos plantaron su bandera en la cima del monte Suribachi, una fotografía para la Historia].

Cuando el visitante entre en el Centro Cultural Santa Catalina apreciará una muestra donde refleja una visión global de la II Guerra Mundial mientras escucha melodías y canciones de Edith Piaf…todo un detalle.

Hitler como pieza de museo


Por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, se realiza en Alemania una exhibición que abordará el tabú de la personalidad de Adolf Hitler. La muestra abrió ayer en Berlín, a pesar de que los organizadores estaban preocupados porque podría convertirse en un lugar de culto para los neonazis o podría acarrear graves críticas por parte de los sobrevivientes del Holocausto.

Teniendo en cuenta esas posibilidades, los curadores que trabajan en el Museo Alemán de Historia de Berlín realizaron esfuerzos denodados para mostrar al líder nazi bajo una constante luz negativa. Para minimizar la controversia, se las ingeniaron también para ponerle a la exhibición un título simple y ambiguo como “Hitler”.

Cuando seis años atrás se insinuó por primera vez la idea de montar la muestra, el profesor Hans Ulrich Thamer, uno de los jefes del museo, hizo saber su temor ante la posibilidad de que se difundiera un mensaje equivocado. El conservacionista insistió en que debían hacer todos los intentos para no caer en la glorificación del líder nazi. “No debemos crear ninguna oportunidad para que la gente se identifique con él”, remarcó. Consecuentemente, mientras la gente puede ver muchísimas imágenes de Hitler, no puede escucharlo, ya que no se pasarán grabaciones de sus discursos. Tampoco se exhibirá un retrato de 1939 del genocida en el que posa como un héroe visionario y que actualmente está en poder del ejército de los Estados Unidos. “Poner en exhibición esos elementos sería pasarse de la raya”, subrayó Thamer.

La apertura de la muestra coincide con una encuesta publicada esta semana que dice que uno de cada diez alemanes quisiera que tome el poder un líder nacional fuerte o un “Führer”. Más del 35 por ciento de esas personas consultadas también dijo estar preocupada por la presencia “excesiva” de extranjeros.

Cuando los visitantes entran ven tres retratos de Hitler. Una lo ilustra como un activista del Partido Nacionalsocialista, la otra como un hombre de Estado y la última, un poco confusa, lo muestra como una calavera en forma de fotomontaje. Imágenes de trabajadores desempleados, de multitudes exaltadas y de soldados que marchaban frente a una casa en llamas son proyectadas desde una pantalla. El video es un intento por poner al dirigente nazi en contexto.

Quienes concurren a la muestra pueden leer un importante material del famoso biógrafo británico de Hitler, Ian Kershaw, que se refiere a la fascinación cuasi religiosa o mística que Hitler generaba en millones de alemanes. “Es un milagro de nuestros tiempos que me hayan encontrado”, les había dicho el líder nazi a unos 140 mil admiradores, que estaban en una carrera en Nuremberg en 1936.

De ninguna manera la muestra significa el primer intento de Alemania para clausurar la discusión acerca de Hitler. A pesar de que el Partido Nazi y la utilización de la esvástica siguen prohibidos en Alemania, ha habido una veintena de biografías y de documentales de televisión que se basaron en el fundador del nacionalsocialismo alemán, así como miles de artículos de revistas y diarios centrados en su figura. En 2004 se destruyó el tabú que provenía de la Segunda Guerra Mundial con la difusión de la película La caída, que ganó un premio Oscar y que da un acercamiento a los últimos días del Führer en un bunker sitiado en Berlín. La producción fue aclamada por mostrarlo como una “persona”, en vez de enseñarlo como un monstruo.

El tratamiento cuidadoso que asumieron los conservacionistas del museo provocó las críticas de la revista Der Spiegel y otras publicaciones, que se quejaron porque, a más de 65 años del fin de la Segunda Guerra, los organizadores siguen siendo condescendientes con el público alemán y tratando el material exhibido “como si fuera pornografía”.

Benedikt Lux, político del Partido Verde, también dijo temer que la exhibición fuera usada como un punto de reunión para los neonazis. Lux pidió estricta vigilancia policial en el museo. Para alejar esas preocupaciones, un vocero del museo informó que las esculturas de Hitler serán colocadas en pequeños gabinetes. “Fotografiarse con ellas en una pose heroica será difícil”, agregó. Levi Salomon, un especialista del Consejo Central de Alemania en antisemitismo, no se mostró alarmado por la exhibición. “Necesitamos tratar la era nazi de diferentes formas”, afirmó.

jueves, 14 de octubre de 2010

La República Checa pone a la venta muñecos de Hitler


Hitler está en venta. Muñecos con la figura del genocida alemán han sido puestos a la venta en República Checa por 80 euros la unidad. Son del tamaño de una Barbie y representan a Hitler, Goebbels y Göring, la cúpula nazi, con sus vestiditos y accesorios incluidos.

El Consejo Central de Judíos en Alemania ha elevado su protesta a las autoridades checas, a las que pide que no permita frivolizar de tal manera con el Tercer Reich, pero lo cierto es que en ese país no hay ninguna ley que priva fabricar ni comercializar tales muñecos.

La empresa fabricante, Drastic Plastic, alega que anteriormente ha editado muñecos de líderes de la II Guerra Mundial, como Churchill, Roosevelt, Truman, Hirohito y Mussolini, en tiradas de 10 mil muñecos por cada líder, que, asegura, son "juguetes educativos".

El Berlín del siglo XXI juzga a la Alemania de Hitler


Berlín inaugura este viernes una amplia exposición sobre Adolf Hitler que en lugar de centrarse en la figura del dictador, analiza las condiciones políticas y sociales de la época y la actitud y actuación de los alemanes para explicar el apoyo que recibió y los desastres que provocó.

Bajo el título 'Hitler y los alemanes. Comunidad y Crímenes' ('Hitler und die Deutschen. Volksgemeinschaft und Verbrechen'), la muestra del Museo de Historia de Berlín analiza por orden cronológico los factores que llevaron a Hitler al poder, las estructuras de su régimen y su política de exterminio, el desencadenamiento de la Segunda Guerra Mundial (1939-45) y la historia de la Alemania de posguerra.

Todo ello se hace vinculando directamente al pueblo alemán, "que en todo momento vio con sus ojos cómo se cometían los crímenes. Nada se hizo secretamente", recalcó Hans-Ulrich Thamer, uno de los tres comisarios de la exposición, durante una visita privada con los periodistas extranjeros acreditados en Berlín.
'Aquí no hacemos un héroe de Hitler'

"Aquí no hacemos un héroe de Hitler", recalcó otra de las comisarias, Simone Erpel. En la exposición, abierta hasta el seis de febrero junto a la famosa Isla de los Museos, se trata el tema "desde una distancia crítica".

Ejemplo de ello es que uno de los pocos objetos pertenecientes al dictador, un escritorio que se encontraba en la Cancillería que él ocupó y que hasta ahora nunca se mostró al público, se expone en un lugar relativamente escondido y no recibe ningún protagonismo. "Queremos distanciarnos del potencial de violencia que representa", dijo Thamer.

Más de 600 objetos, de ellos 400 fotografías, numeroso material audiovisual y de prensa, mucha propaganda, uniformes militares y decenas de símbolos, se exponen en una superficie de más de 1.000 metros cuadrados desde la que se intenta arrojar luz sobre un tema que en Alemania, más de 60 años después de la II Guerra Mundial, sigue formando parte de la vida política y cultural.

"Con Hitler no hemos terminado de ninguna manera", se lee en uno de los últimos carteles de la exposición, en el que se lamenta también que durante décadas, los alemanes guardaran silencio para pasar capítulo y sólo responsabilizaran de lo sucedido a Hitler y a los más altos jerarcas nazis, en vez de al común de la sociedad.
El Tercer Reich, desde otra óptica

Y es que en esta ocasión, y de una forma extraordinariamente novedosa en Alemania, el tema se analiza desde una doble perspectiva: el papel de Hitler y su dictadura nazionasocialista "desde arriba" y la complicidad y vinculación de la sociedad "desde abajo".

Tres enormes retratos del dictador dan la bienvenida al visitante. El primero muestra a un Hitler en sus comienzos, el segundo al 'Führer' como máximo dirigente, y el tercero, una calavera que sólo deja ver los millones de crímenes cometidos.
Tres retratos, tres apartados

Los retratos marcan los tres apartados en los que se divide la exposición, que por orden cronológico aborda el fallido golpe de Estado que Hitler llevó a cabo en 1923, su subida al poder en 1933, el Estado que creó y la sociedad que lo pobló, la dura persecución de todos los grupos que no cabían en el "Reich", la guerra de exterminio y el país que dejó, todo, desde el punto de vista de la sociedad.

En todos esos apartados se busca la misma respuesta: ¿cómo fue posible que el régimen nazi, con Hitler en el poder -responsable de la guerra, los crímenes y el genocidio-, siguiera gozando hasta el final de una amplia aceptación entre la sociedad alemana?

Para ello, los tres comisarios estudiaron con detalle la relación existente entre el 'Führer' y los alemanes, centrándose sobre todo en el poder de fascinación que Hitler ejerció sobre el pueblo, que lo calificó como el líder más carismático que había tenido nunca y se auto-organizó en torno a él.

El Memorial Democrático homenajea al general estadounidense Charles Yeager en Sort

El Memorial Democrático de la Generalitat y el Ayuntamiento de Sort organizan este jueves un acto de homenaje al general norteamericano Charles Yeager, máximo referente del centenar de pilotos aliados evadidos durante la Segunda Guerra Mundial a través de los Pirineos.

El general Yeager (Myra, EE.UU., 1923), que ha pasado a la historia de la aviación porque el 14 de octubre de 1947 fue la primera persona en superar la velocidad del sonido con una aeronave, es también uno de los más ilustres combatientes y refugiados de la Segunda Guerra Mundial que pasaron por Sort huyendo de la barbarie nazi o para combatir junto a los aliados. Yeager tiene dedicado un espacio en la Prisión Museo Camino de la Libertad que la Red de Espacios de Memoria del Memorial Democrático tiene en Sort.

En el acto, al que asistirá Yeager, intervendrán también el secretario de Relaciones Institucionales y Participación, Josep Vendrell; el alcalde de Sort, Agustí López; el presidente de la Diputación de Lleida, Jaume Gilabert y el jefe de movilidad aérea del mando aéreo de Combates, del Ministerio de Defensa, Eduardo Gil, además del historiador Josep Calvet.

martes, 12 de octubre de 2010

Un campamento nazi a orillas del Órbigo


De repente, surge la noticia. ‘Hidden soldier’, un cortometraje del director leonés Alejandro Suárez Lozano, participará en la sección oficial de la próxima edición de la Semana Internacional de Valladolid, la Seminci de siempre, y optará a su palmarés oficial en representación de la cinematografía española. Tiene 30 años y lleva toda la vida entregado a la devoción por el cine. “Mi interés por el cine viene de familia y creo que nunca, desde que tengo uso de razón, he querido hacer otra cosa”, comenta Alejandro, hijo del cineasta Julio Suárez, desde Londres, ciudad donde actualmente , “con la ideas más claras que nunca y con la palmadita en la espalda de la Seminci”, se encuentra afincado, sobre todo “por cambiar de aires y para ver cómo y qué posibilidades hay en el mercado europeo para el cine”. Alejandro se mueve en el oficio cinematográfico como pez en el agua. Desde que era un chaval, fue manejándose en el asunto de la creación cinematográfica con indiscutible soltura y asimilando las muchas enseñanzas que le proporcionaban los rodajes de su padre (en ‘Tritones’, por ejemplo, asumió el diseño de producción). Tras ‘A galope tendido’, el primer largometraje firmado por Julio Suárez —uno de los grandes pioneros del cine leonés—, decide emprender una nueva aventura personal, primero en la Escuela de Cine de Ponferrada y luego en Madrid, donde compatibiliza sus estudios de publicidad con su actividad de diseño de ‘story boards’ para directores como Achero Mañas o Daniel Monzón, entre otros, “de los que aprendí una barbaridad”.

‘Hidden soldier’ surge de la obsesión de Alejandro Suárez por el edificio de la Azucarera de León. “Un lugar enigmático, mágico, dramático...”. Sin embargo, cuando ya maneja una historia y se pone manos a la obra para arrancar el proyecto, se inician las obras de remodelación del inmueble, lo que le obliga a cambiar todos sus planes. “A partir de ese momento comenzó una carrera de fondo para encontrar una localización similar en la provincia, misión en la que no confiaba mucho. Coche arriba, coche abajo con mi ayudante de dirección y amigo, el también leonés Guillermo Navajo (y codirector del primer cortometraje de Alejandro Suárez, ‘Escorzo’, rodado en 2005), dimos con la Azucarera de Veguellina”. Esta, abandonada desde hace tiempo, fue ‘asaltada’ por ellos, “saltamos la valla de estranjis”, y acabó desatando su asombro, “nos quedamos boquiabiertos con el lugar”. Aquella era una edificación ideal para recrear el guión de ‘Hidden Soldier’, que, escrito por el propio Suárez y Juan Ferro y ambientado en la Normandía de 1944, sigue la peripecia de un soldado norteamericano aislado en un campamento alemán mientras cumple una misión suicida. “Más allá del argumento, probablemente ya visto en cientos de películas de Hollywood, la historia nos permite adentrarnos en la cabeza del protagonista y experimentar con él las consecuencias del estrés y la violencia que esa situación pueden generar. Para mí el reto era generar esa sensación, en primera persona. Es ante todo un reto narrativo”.

Víctor Clavijo, actor que atesoró enorme popularidad tras su paso por la teleserie ‘Al salir de clase’ y que ha ido madurando una exhaustiva trayectoria en los medios televisivo, cinematográfico y teatral, adoptó la personalidad del soldado Wilson mientras respira quebrado en contexto tan hostil, representado en este caso por la Azucarera de León, a la que, dadas sus características físicas, apenas hubo que hacerle modificaciones para adaptarla a las circunstancias de la narración. Juan Carlos Pajares, otro de los habituales en el cine de Julio Suárez, representa al teniente Hermann Schneider, el mando nazi que dirige la caza y captura del soldado americano, completándose el elenco con Angel Sánchez, Alberto Sánchez, Manuel Sanchis, Pascual Gandía y, sobre todo, los catorce componentes del grupo de reconstrucción histórica ‘Grossdeutschland’, de origen levantino, que, además de interpretar al pelotón alemán, asesoró al director leonés en asuntos militares y también históricos. “Nos pusieron el listón muy alto a todos nosotros. Daba igual si llovía o hacía frío, ellos estaban ahí, metidos en el papel...”. Los efectos especiales fueron relevantes en la puesta en escena porque “había que generar una auténtica sensación de estar dentro de un campamento alemán”. Así, los efectos visuales ideados por Alex Martín (que también trabajó en ‘Tritones’) confirieron un ambiente singular a la película en la que no faltaron tanques, camiones y aviones, entre otros elementos. Ramón Molina creó en los cuatro días de filmación efectos más tradicionales, como las explosiones, los disparos o la sangre.

Otros dos habituales del cine de Julio Suárez —que en ‘Hidden Soldier’ ejerce como productor a través de su compañía Estirpe—, el director de fotografía Pablo Bürman y el compositor leonés Pablo Vega, fueron decisivos en la caracterización de un film que sufrió diferentes sinsabores a lo largo de su rodaje (mal tiempo, problemas técnicos, algún herido...) y cuyo montaje se prolongó durante cuatro meses para finalmente determinar sus definitivos doce minutos de duración. Al final, cerca de 60.000 euros se fueron en este corto que ya tiene garantizada la distribución internacional, gracias a un acuerdo con la agencia Freak, y que conocerá su estreno en la Seminci, “fue una sorpresa para todos; aún sigo atónito”, una rampa de lanzamiento idónea para las ilusiones de un chaval que sueña y sabe a cine.

domingo, 10 de octubre de 2010

Un corresponsal de leyenda

George Steer ofrece un personaje de leyenda a pesar de que su crónica más célebre, el bombardeo de Gernika, le sepultó bajo el peso de la historia. En sus 35 años de vida encarnó el espíritu de un Quijote moderno dispuesto a librar cualquier batalla en nombre de la democracia. En aquellos tiempos turbulentos, su pluma tuvo un eco demoledor hasta el punto de remover la conciencia de genios de la talla de Picasso, que se inspiró en su extraordinario relato para crear su irrepetible Guernica.

Su origen acomodado en Sudáfrica apenas podía presagiar su intenso periplo vital que le hizo vivir varias vidas en una como periodista, escritor y soldado. El periodismo estaba reservado para él como derecho de cuna ya que su padre era propietario de un rotativo sudafricano.

Sus primeras crónicas sobre cricket, se alejaban del corresponsal de guerra que puso en jaque la maquinaria propagandística del nazismo. Sin embargo, su espíritu inquieto, algunas fuentes hablan incluso de una personalidad difícil, le llevaron a cubrir los principales conflictos bélicos previos a la Segunda Guerra Mundial.

Su bautismo de fuego se produce en Abisinia, donde denuncia el afán imperialista italiano en el continente africano. En este país, conoce a su primera mujer, también corresponsal, la anglo-española Margarita de Herrero.

El contacto con Euskadi supuso un flechazo hacia la cultura y la causa vasca. Su propio periplo personal, su marcha repentina a Londres por el fallecimiento de su mujer, permitió descubrir a las autoridades vascas que el bloqueo del puerto de Bilbao era en realidad una operación ficticia para bloquear la actividad diaria.

De hecho, el corresponsal fue un abanderado del Gobierno vasco y logró cautivar una fuerte amistad con el propio lehendakari Aguirre. La relación se cimentó en una corriente de simpatía mutua fruto de la coincidencia de edad y del fuerte idealismo de ambos. Con todo, el muñidor de la relación fue Bruno Mendiguren, tío del actual concejal de Bilbao Ibon Areso, que ejerció de enlace de prensa en el Gobierno vasco.

Para la posteridad queda su crónica de la masacre de Gernika. A las 19.45 horas del 26 de abril de 1937, cuando las aviaciones alemana e italiana culminaban su asalto, Steer cenaba junto con otros dos corresponsales en Bilbao.

Su salida precipitada le permitió contemplar sobre el terreno la destrucción total de Gernika recopilando los testimonios de las víctimas. El inglés tuvo que poner en el mapa mediático a una población desconocida para el mundo enmarcándola como villa espiritual de los vascos.

Su relato supuso su ingreso en la lista negra de la Gestapo de Hitler. Steer culminó su relato de la masacre con su ensayo The tree of Guernica, publicado por el exilio vasco en Venezuela en la década de los 60.

Tras la caída de Bilbao, huyó a la desesperada hasta alcanzar París en un estado lamentable. En la Segunda Guerra Mundial dio un paso adelante reclutado en el ejército británico. Paradojas de la vida, su muerte se produjo en la India cuando se dirigía a una prueba deportiva. En su muñeca se le encontró un reloj, regalo personal de Aguirre.

viernes, 8 de octubre de 2010

Una muestra lucha contra el olvido del dolor vivido en Mauthausen

El Archivo Histórico de Provincial de Álava acoge hasta el 7 de enero una exposición que pretende luchar contra el olvido que padecieron miles de españoles deportados en el campo de concentración nazi de Mauthausen desde 1940 hasta su liberación.

La muestra, titulada "En los campos nazis", se compone de esculturas, cuadros, dibujos o maquetas elaboradas por supervivientes del campo de concentración austríaco.

Salvo uno de los autores, ninguno era profesional del arte, pero todos ellos vieron la necesidad de transmitir lo vivido para luchar contra la ignorancia de los crímenes cometidos.

Entre los creadores figuran Manuel Alfonso Ortells, Ramón Milá Ferrerons, Juan García Gisbert, Enrique Martín Hernández, Francisco Mateu Sanchís y Eduardo Muñoz, éste último artista profesional y amigo de Picasso.

Ramiro Santiesteban, de 88 años, uno de los supervivientes españoles de Mauthausen, ha estado presente hoy en la inauguración de la exposición en el Archivo Histórico de Álava, junto al director general del Libro, Archivos y Bibliotecas del Gobierno español, Rogelio Blanco, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces, y el director del Archivo, José Antonio Sáinz.

Las piezas expuestas proceden de dos colecciones donadas al Ministerio de Cultura por la Federación Española de Deportados e Internados Políticos (FEDIP) y por la familia de Ángel Hernández García (Hernán), todas ellas conservadas en el Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca.

El director general del Libro, Archivos y Bibliotecas ha hecho hincapié en el "dramatismo" de las piezas que se exponen en la muestra y ha indicado que el objetivo es que los deportados que sobrevivieron a aquella experiencia no caigan en el olvido porque eso sería "una segunda violencia".

Ha confiado en que esta muestra, que ya estado abierta al público en Salamanca y ahora en Vitoria, recorra otras ciudades españolas y europeas y ha recordado que fueron 7.000 los españoles que fueron deportados a campos de concentración nazis, de los cuales sobrevivieron alrededor de un tercio.

Blanco ha subrayado el esfuerzo que está haciendo el Gobierno por poner nombres y apellidos a las víctimas españolas de los campos de concentración nazis y a las víctimas de la Guerra Civil y del franquismo, y ha dicho que aspiran a poner nombres y apellidos a más de cuatro millones de víctimas que se produjeron entre el año 1936 y 1975.

El delegado del Gobierno en el País Vasco ha pedido a las personas que acudan a visitar la exposición que vean con "una mirada limpia" la muestra y reconozcan su dolor expresado a través del arte.

Un prisionero de guerra se reencuentra con su hermana después de 80 años

Separados cuando murió su madre, Heinz perdió gradualmente el contacto con Edith después de que, tras unirse a la Wehrmacht de joven, fuese capturado en Países Bajos y acabase como prisionero en un campo de Escocia en 1945.

Originalmente de Hindenburg, renombrada como Zabrze en el sur de Polonia, Roestel es uno de los miles de prisioneros que se quedó en Reino Unido después de la guerra por que se enamoraron, encontraron trabajo o perdieran sus casas después de que Alemania se dividiera en dos.

Los historiadores reconocen que la integración de estos prisioneros, donde se incluye a la leyenda del Manchester City Bert Trautmann, ayudó a curar las heridas y abrió puentes con el continente europeo, aunque su destino se ha pasado a menudo por alto.

Roestel, de 85 años, se asentó en el sur de Escocia y con la esperanza perdida de poder ver una vez más a Edith, fue ella quien siguió su pista hasta el pueblo de Penpont este verano. Poco antes de salir desde Alemania, su hermano sufrió un infarto, pero aún así pudo reconocerla.

"Se parece a mi madre", dijo Roestel desde su cama de hospital en Dumfries. "Estaba encantada de verme. Cuando no has visto a alguien durante 80 años, estarías igual", añadió.
"No tenía un lugar al que volver a Alemania", explicó Roestel, cuyo padre murió en la guerra. "Tenía que haber vuelto al sector soviético, así que decidí permanecer aquí", aclaró.

Como otros alemanes que viven en los alrededores de Dumfries, Roestel fue internado en el campo de Carronbridge donde prisioneros de guerra y desplazados desde Europa permanecieron hasta su clausura en 1948.

Al principio, los británicos estaban recelosos por tener ex soldados alemanes en su tierra. Algunas encuestas de la época recogían que el 60 por ciento de los británicos tenían un mala visión de los alemanes. Un año después, dicha cifra descendió al 20%.

En los alrededores de Thornhill, los locales establecieron vínculos con los alemanes, como Riestel, que se casó con una mujer de la zona. "Solían jugar al fútbol y Thornhill pasó a apoyar al equipo de Jerry", comenta Margaret Marchbank, de 76 años y originaria de la región.

La experiencia de vivir y trabajar con alemanes ayudó a los británicos a olvidarse de la guerra, afirma Terry Charman, historiador del Museo de Guerras Imperiales, pero no se ha prestado mucha atención a los prisioneros de guerra.

"La sensación que tienen los británicos de los prisioneros de guerra se resumen a Colditz y 'La gran evasión'", comenta Charman. "Creo que muchos jóvenes se sorprenderían al aprender que los prisioneros de guerra alemanes estuvieron viviendo aquí normalmente", agregó.

Unos 400.000 prisioneros alemanes acabaron en Reino Unido en 1946, que correspondían a un cuarto de los trabajadores de la agricultura del país, comenta la experta en migraciones alemanas después de la segunda Guerra Mundial, Weber-Newth, de la Universidad Metropolitana de Londres. "Contribuyeron satisfactoriamente a la economía británica", añadió. "Y de alguna forma fueron los pioneros de la Unión Europea", opinó.

Richard Michalek, de 85 años, dice que la hospitalidad de los granjeros de las Highlands escocesas les convencieron para quedarse, pero no antes de recorrer medio mundo como prisioneros de guerra. Capturado en Normandia por estadounidenses cuando tenía 19 años, Michalek fue transportado a Inglaterra, después cruzó el océano Atlántico donde trabajó en los campos de algodón de Oklahoma vestido con ropas negras.

"Nos llamaban las SS de Truman", refiriéndose al presidente estadounidense Harry Truman y a la fuerzas de élite de los nazis. Fueron devueltos a Reino Unido a través del Canal de Panamá, desde donde llegarían a Escocia y se encontrarían a varios oficiales en 'kilt'... Y no pudieron parar de reir.

"Nunca había visto a un hombre con falda", comenta Michalek. Los mandos les obligaron a permanecer de pie en el frío durante horas.

"Al final, unos 15.000 alemanes se quedaron", comenta Weber-Newth. Algunos, como Roestel, nunca miraron atrás, hasta el punto de que cuando se reencontró con su hermana tuvieron que hablar en inglés a través de un yerno.

"Después de que te casas tienes que hablar escocés para sobrevivir: olvidas la mayoría del alemán. Nunca volví", dice Roestel, que trabajó de ganadero hasta que se retiró en 1990, en el momento en el que Alemania se unificaba.

Otros como Georg Kotzyba, un bisabuelo de 84 años, ha mantenido lazos con Alemania a pesar de pasar casi toda su edad adulta en Escocia.

"Fui soldado durante 6 meses y me capturaron. Pero suelo volver todos los años", comenta Kotzyba, que se siente afortunado a pesar de pasar por 18 campos de prisioneros. "Cuando veo lo que les pasó a los prisioneros en Rusia, no hay comparación", añade.

Todavía algunos mantienen una fuerte identidad nacional, como Kotzyba y Michalek, que mantienen su pasaporte alemán.

"Apoyo a Escocia cuando juegan contra otro equipo" dice Kotzyba con una sonrisa. "Excepto cuando se trata de Alemania", precisaba.